viernes, abril 23, 2010

Comentarios Finales

Voy cerrando esta semana con dos breves comentarios exploratorios sobre este post, teniendo presente que a esta alturar capturar en un post todo lo generado por la BEA al respecto se torna imposible.

Primero, yo hubiese cuestionado un aspecto del post anterior, o al menos, parte de sus conclusiones (¿donde estas los liberales formados cuando uno los necesita?). Si bien algo se dijo de forma tangencial, quizás el punto que más ruido me hace a mi es el siguiente: hicimos un par de correlaciones bivariadas (en principio, nada muy grave en eso) pero de allí saltamos a conclusiones que asumían causalidad, punto que nadie critico de forma explícita.

Dicho de otro modo, vimos que no había correlación entre inflación y crecimiento anual del PIB y cuestionamos la visión de que la inflación cause mayor crecimiento. Si bien eso lo podemos sostener, también se admite la causalidad opuesta de que el crecimiento del producto no causa inflación, ya que había países con crecimiento promedio superior al 6% anual en la demanda efectiva sin que eso genere una tensión evidente sobre el nivel de precios*.

Segundo, off-the-record, un amigo nos comenta que la particularidad del caso argento sería que no sólo creció de forma acelerada en esos seis años (en promedio), sino que también fue de los países que más empleo genero trasladando las tensiones del mercado de trabajo a los precios. Para analizar este punto, armamos una base con las tasas de desempleo para 76 países** y observamos cual fue la variación promedio por año (en puntos porcentuales) de este indicador:
Argentina es para toda esta muestra, el país de mayor caída en la tasa de desempleo, promediando casi 2 p.p. menos por año. Era en 2003, el país que figuraba primero en nuestro ranking, cayendo al puesto 32 en 2009. Por supuesto, en el otro extremo los países más afectados por la crisis internacional: Irlanda, España, USA, etc.

Ahora bien, si esta es la particularidad del caso argentino, no sería más que un nuevo caso de la curva de phillips, donde las tensiones de un mercado laboral más estrecho se traducen vía pujas salario-rentabilidad en mayor inflación salarial y de precios. Nuevamente, la inspección visual (nunca claro, la estadística) muestra algo así a nivel global:
Pero claro, la tan mentada curva tiene tantos problemas que no vamos a discutir hoy acá. Además, esto nos lleva nuevamente al mundo de Rollo donde la inflación responde al problema de los trabajadores argenchinos de 2003. La pregunta relevante sería quizás, si con un TCN más bajo se hubiese creado la misma cantidad de empleo (cosa que entiendo Lucas respondería afirmativamente) y si en ese caso, las tensiones salarios-retabilidad se habría evitado, o dicho en otro términos ¿bajar la tasa de desempleo desde donde estaba en 2003 a los niveles de 2009, no implica para cualquier política cambiaria o de otro tipo generar la inercia observada? ó más precisamente, la pregunta anterior, ¿no es particularmente valida para Argentina?.

Sea como sea, esta salida a la ""evidencia internacional"" nos deja nuevamente donde empezamos. No somos tan distintos, pero tampoco todo es igual. En el camino, creo, vamos viendo que las explicaciones unicausales de la inflación solo captan una parte tangencial del fenómeno. Quizás, lo más relevante más allá de esto, es como estabilizar sin tirar al bebé con el agua. Cerremos con una cita del Gran Daniel que alguien dejo por ahí:

“Inflation is the observable outcome of a complex process of political and economic interaction in society. In such a context, ‘cause-and-effect’ language easily becomes misleading."

Saludos y buen finde.

Genérico.

* Alguno podrá decir aquí que lo relevante no es la variación año a año del PIB sino su brecha respecto del potencial. Convegamos que a no ser que sea China (cantidad de factores) o Singapur (productividad del trabajo) es díficil que el potencial crezca por arriba del 5% anual, lo que hace que para la mayor parte de los países, la brecha debe haberse cerrado... como en argentina.

** Armar la base de datos llevo tiempo y se hizo a mano. No hay casi nada de data de muchos países, por lo que si alguien tiene algo mejor, que avise.

17 comentarios:

oti dijo...

Muy bueno Genérico.

Haber introducido en el asunto la cuestión del empleo da otra sencación al asunto.

Lo que no entiendo es por qué se dice que no hay causalidad opuesta x el crec. del producto y, luego, señalar que creció mucho el empleo. Si crece el empleo es porque hay crecimiento o no?

¿Sería como que el crecimiento acarrea inflación vía tasa alta de aumento del empleo?

Generico dijo...

Oti, quizás el punto es que sea díficil generalizar algo así.

Pero en Arg 2003-2009, es claro que hubo crecimiento real, del empleo e inflación.

El tema es que hay más allá de la correlación, la pregunta sería ¿cual es, si es que hay, la relación entre las tres?.

Kaloma dijo...

Lo q las relaciona es la politica fiscal. La pregunta es cuanto del crecimiento del gasto del 2006 a la fecha contribuyo a generar empleo, o si la mayor parte de la generacion de empleo se dio antes del 2006.

La inflacion te dice q llegaste al tope, dde la oferta no puede (x un problema de desacople de tiempo entre demanda agregada y respuesta de la oferta, dada una politica cambiaria q no ajusta el TC nominal) o no quiere invertir los recursos necesarios xq su margen disminuye (dada la politica fiscal q les saca recursos, mas facilmente visible en terminos del GP sobre PBI).

En cualquier caso, la pata fiscal es el protagonista proncipal, xq es el q gatilla la emision disfrazada, xq es el q desplaza a la inversion privada y xq es el q no permite q el sector externo actue, al fijar el TCN.

Como decirlo, el gasto publico es como el burrito Ortega, la popu lo pide, los compañeros lo miran mal xq siempre llega a tarde o falta a los entrenamientos, pero al final todos se lo bancan xq los demas integrantes del equipo no tienen la altura necesaria para jugar en la primera de River, pero el fondo de la cuestion es q el chupi lo esta matando.

Salutti

Generico dijo...

Kalo, te fuiste a la mierda.

Dejalo a Ariel afuera de esto.

Hector M. dijo...

Recuerdo haber señalado en un comentario al post aludido, que las relaciones bivariadas pueden ocultar la influencia de otras variables, lo que en estadística se llama "confounding factors", que producen correlaciones espurias. En ese mismo post cité un estudio concreto, de Robert Barro, donde mide la correlación crecimiento-inflación controlando otros factores, y del cual surge una correlación inversa entre ambas variables. Se me respondió diciendo que el modelo de Barro estaba mal especificado, lo cual puede ser muy cierto (no lo sé) pero no aborda el tema que yo aludía (el uso de correlaciones bivariadas o simples, sin controlar posibles confounding factors).
Cuando se criticaba la curva de Philips (inflación versus empleo) y sobre todo sus pretensiones de causalidad, alguien examinó la secuencia temporal de los diferentes puntos del gráfico (para un país determinado, como GB o USA) y encontró que si bien los puntos seguían una curva descendente, su ordenamiento temporal seguía una trayectoria completamente caprichosa y arbitraria, lo cual indicaba que un aumento de la inflación no necesariamente es seguido de un descenso del empleo, ni viceversa.

Que se puede exacerbar (por algún tiempo) el crecimiento del empleo mediante el abaratamiento de la mano de obra a través de un dólar alto es algo conocido. Que la exacerbación del crecimiento del producto y el empleo, obtenidos de esa forma, conducen luego a un aumento de la inflación que termina por apreciar la moneda en términos reales (es decir a encarecer la mano de obra en dólares) es también un hecho conocido. Que si el gobierno aumenta a la vez sus gastos de manera insostenible tendrá que financiarse con emisión y acelerar aún más la inflación, también se sabe desde siempre.
Lo que no siempre se pone de manifiesto es que si se acepta la definición de Fajnzylber según la cual las ventajas comparativas obtenidas por vía cambiaria son ventajas "espurias" (versus las "genuinas" que provienen de una mayor productividad), el razonamiento anterior indica que una parte del crecimiento (la parte que obedeció al mecanismo mencionado) es "espurio", y por lo tanto también son "espurios" (es decir insostenibles) muchos de los puestos de trabajo creados (entre ellos los grandes números de empleos públicos generados en esta década, y también en muchas industrias no competitivas sostenidas con respiración artificial).
Esas medidas pueden justificarse para salir de una fuerte recesión, como la de 2002, pero deben ser reemplazadas con otras políticas una vez que el crecimiento se restablece (como están haciendo ahora en China, EEUU y otros sitios). Esto es puro keynesianismo (incluyendo los problemas de ese esquema que ya fueron señalados en 1943 por Kalecki en su famoso artículo sobre los aspectos políticos del pleno empleo).
En la Argentina, lamentablemente, una vez superada la recesión (digamos en 2005) se creyó haber encontrado un "modelo" que servía para seguir indefinidamente. Muchos economistas vernáculos con ideas del año de la pera justificaban esas ideas (el estimable doctor Aldo Ferrer, prominentemente). El resultado fue el esperable: crecientes problemas fiscales, creciente inflación, frenazo al crecimiento del empleo (y luego aumento del desempleo, pese a todo), falta de inversiones, enorme fuga de capitales, aumento de la pobreza, y una sostenida apreciación real de la moneda que todavía continúa (y que en principio seguirá profundizándose hasta fines de 2011 pues es lo único que el gobierno puede tratar de hacer para evitar que se le dispare la inflación).

Larry dijo...

Mi estimado. En su post anterior escribió:

Custiona “cierto argumento de que para crecer es necesario tener inflación. Entiendo yo que de algún modo u otro si se piensa esto, se piensa que existe una correlación positiva entre crecimiento de los precios y crecimiento real del producto”

¿Usted con estos post me da a entender que esa correlación sería espuria?

Al margen del valor del coeficiente para cada país, ¿usted me indica que no existe relación entre las variables?,

Pregunto, ¿encuentra un país que crece y al mismo tiempo observa deflación?

En lo teórico, para crecer siempre el primer paso lo genera la demanda (eso de que la oferta crea su propia demanda se lo dejamos para otra escuela). En un mercado que parte del equilibrio, la mayor demanda genera tensión en el mercado, que se observa en los precios. Esta es la señal que espera el productor para incrementar la oferta.

Respecto a sus ejercicios, los países emergentes están llenos de shock que distorsionan el análisis. Haga el mismo ejercicio para EEUU, Alemania y Japón, el 50% del PBI mundial, y deje el 25% restante que solo distorsionan la serie ante la bataola de shock diarios que reciben y la poca espalda para sobrellevarlos.

Supongamos que los últimos 20 años Estados unidos crece al 3% con 3% de inflación. Es decir, por cada punto de crecimiento real hay un punto de crecimiento en los precios. ¿esto es espurio?¿no hay relación causal?

Me gustaría saber su opinión respecto a que dice la teoría.

El del 0.33% dijo...

¿En serio Rollo cree que si apreciábamos manteníamos el nivel de empleo?

Hector M. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Hector M. dijo...

No sé lo que piensa Rollo. Yo diría que si el BCRA no hubiera sostenido el valor del dólar (en vez de cumplir su misión legal de sostener el valor del peso), el empleo inicialmente no hubiera crecido tanto (excepto en el Estado, como corresponde durante la recuperación de una crisis, aunque ello debió ser a través de empleos temporarios en tareas trabajo-intensivas), pero después de un tiempo el empleo hubiera comenzado a subir más fuertemente, con la ventaja de que se trataría de empleos "genuinos", que no dependerían de un dólar artificialmente alto para sobrevivir.

Esto, por supuesto, hubiera implicado no subir las retenciones (que en 2003 eran de 10%), y más tarde eliminarlas, y asimismo no aumentar el gasto público en la forma desmesurada que éste aumentó, sobre todo desde 2005-2006 en adelante. También habría que haber arreglado en serio el default y volver a integrar el país en el sistema financiero mundial, a fin de promover inversiones y no alentar la fuga de capitales. Eso es lo que corresponde hacer después de aplicar una política keynesiana para reactivar la economía.

Pero todo esto es un sueño: hubiera implicado que además tuviéramos un gobierno sensato. "Los sueños, sueños son".

niemca dijo...

El otro día escuché a Heymann hacer una analogía brillante sobre las discusiones que se dan sobre la inflación. Más o menos, el cuento fue así...

La inflación es como una calesita. Si parás un tipo no muy vivo enfrente, primero te dice ve un caballito y te dice "es un caballito". La calesita sigue girando, ve un avioncito y te dice "es un avioncito". Y la calesita sigue girando, ve un autito y te dice "es un autito"... pero en realidad no es ninguna de esas cosa solamente, es la calesita!!!!

Con la inflación, pasa lo mismo... primero un tipo viene y te muestra la tasa de expansión de la oferta monetaria... y uno dice "claro, es la oferta monetaria". Después viene otro y te muestra alguna nota o encuesta donde los empresarios dicen que esperan una inflación alta este año... y uno dice "claro, son las expectativas". Y así sucesivamente con otras causas... pero en realidad no es ninguna de esas cosas, sino que es todo!!!! Es la calesita!!!

Obviamente relatado por él es mucho más interesante, pero hice mi mejor esfuerzo.

Hector M. dijo...

Esta no se la escuché a Heymann, pero se refiere a la relación entre las políticas inflacionarias y el crecimiento.
Es como hacer un asado. Si tenés carbón o leña, a veces no conseguís encender bien el fuego, así que algunos (sobre todo algunos puebleros chambones) le echan alcohol o kerosén para que empiece a arder el fueguito. Si arranca, macanudo.
Ahora bien, si alguno te dice que tenés que seguir echando kerosén para mantener el fuego, el asado te va a salir horrible.

Y si no tenés ni carbón ni leña, y pretendés cocinar la carne echándole kerosén durante todo el proceso, posiblemente te incendies, y el asado se queme mucho antes de cocinarse.

El kerosén, o las políticas de reactivación y estímulo, pueden usarse para iniciar el fuego, pero no sirven para mantener el fuego, ni para hacer el asado. Y los buenos asadores no usan kerosén, así como las buenas políticas económicas no usan siquiera políticas de reactivación deficitarias sino fondos anticíclicos y otros recursos menos "incendiarios".

santino dijo...

http://data.worldbank.org/indicator/SL.UEM.TOTL.ZS

lucas dijo...

for the record: no estoy seguro de la respuesta. Está claro que con un dólar de $1,20 no arreglábamos el desempleo y con un dólar de $10 generábamos el mismo empleo que generamos. No tengo claro cuándo se hace totalmente empinada la curva. Mi impresión, como quise poner en un post, es que el dólar de 2003 (equivalente a que hoy tuviéramos un dólar de 7 pesos) estaba ciertamente en una parte extremadamente inclinada de la relación tipo de cambio--empleo; y que si con $2,40 generábamos unos poquitos empleos menos el beneficio en términos de inflación valía la pena.

lucas dijo...

pero insisto: no me animaría a asegurar que con $2,40 generábamos menos empleo. Creo que al tomar trabajadores las empresas también tienen en cuenta el tipo de cambio real esperado; además, si endogeneizamos el hecho de que la inflación generó el INDEK y el INDEK generó el plus de riesgo país respecto a Brasil, me parece muy difícil estar seguro del contrafáctico.

Hector M. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Hector M. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Hector M. dijo...

Rollo,
el problema no era "en cuanto fijamos el dólar": en 2002 el gobierno intentó fijarlo (en 1.40) y no pudo, se le fue a 3 pesos (con un breve pico cerca de $4). Ello fue consecuencia del reemplazo del régimen cambiario (un peso de 2002 en adelante ya no era la misma mercadería de 1991-2002). Y quizá para salir de la crisis era necesario como medida de corto plazo un dólar nominal alto, aun sabiendo que luego la moneda se iría apreciando (como siempre ocurre, y sobre todo con los altos precios internacionales que había).

El problema no fue ése, sino el intento de mantener a la fuerza el dólar en 3 pesos una vez superada la crisis, en 2005 y años sucesivos, cuando el dólar se depreciaba nominalmente en todos los países vecinos (y en el resto del mundo). En primer lugar, ello se hizo con emisión y recalentó la economía, creó inflación, se comió el superavit primario, y generó más desconfianza. En segundo lugar, ello no impidió la continua apreciación de la moneda en términos reales, vía inflación. Dejando flotar el tipo de cambio desde 2005 hubiera generado menos inflación, y los altos precios internacionales hubieran impedido que la apreciación resultante (vía una baja del TCN) enfriase la economía: de hecho, la apreciación existió, vía precios, y la economía no se enfrió tanto (aunque ya fue bajando la tasa "verdadera" de crecimiento desde 2006 hasta la recesión de 2009). Se hubiera enfriado quizá menos con un régimen más sostenible y más abierto, donde probablemente hubiera habido más inversión privada y menos fuga de capitales.
No estoy de acuerdo con tu idea de que "la inflación generó el INDEK". El INDEK (es decir la destrucción del INDEC y el falseamiento de las estadísticas) fue exclusiva obra de nuestro venerado capo di tutti capi, NK, que decidió estafar a los tenedores de bonos indexados al CER mediante una maniobra delictuosa, que a la larga le costó más inflación, más deuda, más riesgo país, y más intereses que los que hubiera tenido que pagar por el CER generando menos inflación.
El país siguió aislado del mundo por un complejo coherente de políticas dirigidas a ese fin: una quita salvaje a la deuda en default (que muchos consideran "un éxito"), un rechazo de más del 20% de los bonistas, pito catalán al Club de Paris, pito catalán al FMI, pito catalán a los bonistas con CER, invectivas contra los inversores en cuanta reunión tuvieron con empresarios extranjeros (en España y otros sitios) tanto NK como CFK, confiscación de activos de las AFJP, cambio brusco de reglas de juego en una multitud de temas, prohibición de exportar, aumento de retenciones desde 10% (2002-2003) a 35% (2007) y frustrado aumento adicional con la Res.125, maltrato reiterado a diversas empresas (Aerolíneas, Telecom, Papel Prensa, Clarín, y muchas más), alianza abierta con Chávez, patoteo de Moreno a innumerables empresas argentinas y extranjeras, presiones sobre los jueces, etc.etc.
Con ese panorama, el que inviertese en la Argentina pudiendo hacerlo en otro lado, o es bobo o es un amigo del gobierno que tiene un arreglo por debajo de la mesa.
Los 47.000 millones de dólares que se destinaron a lo que eufemísticamente se llama formación de activos externos fuera del sistema bancario (vulgo fuga de capitales) indican que los ahorristas argentinos no son bobos. La falta de inversiones extranjeras directas en comparación con los países vecinos, así como el continuado cierre de los mercados financieros voluntarios, es también testimonio de que no hay confianza en el mundo acerca de la Argentina.