martes, marzo 30, 2010

Winds of Change

La reciente recomendación del Coek y la confirmación del amigo Escriba de hace unos días es señal inequivoca de que se vienen tiempos interesantes. (¿De autocrítica? ¿Exponemos todos la yugular?)

Hace dos años, cualquier recomendación de utilización del ancla cambiaria como herramienta antiinflacionaria era, en la más sutiles de las versiones, acusadas de neo-noventismo voraz. Por el contrario hoy, estas posturas, se escuchan hasta en los más fervientes defensores del "Modelo de Tipo de Cambio real alto y estable" (TCRAE).

(Este servidor lo habia dicho acá (1, 2 y, 3), pero es lo suficientemente humilde como para no andar haciendo autobombo)

El proceso de transición es tangible, e implica (o implicará), sin un orden especifico, reconocer que...

(1) ... en un modelo de TCRAE no hay sólo y siempre ganadores, sino que alguien lo paga. (simplificando el punto al extremo, diría que el impacto es casi siempre regresivo, TCRAE = salarios bajos)

(1 bis) ... la canasta de consumo es lo suficientemente diversa como para que alcance el desdoblamiento de dos o tres commodities para protegerla de una moneda débil (Thesis pending).

(2) ... que jugar con el tipo de cambio puede generar presiones inflacionarias y que cuando despegan es una herramienta estabilizadora fundamental.

Y en algun futuro cercano

(3) ... que su impacto sobre la salud de la cuenta corriente y en particular sobre la dinámica de las exportaciones es mucho menos importante de lo que se suele creer. Esto es, que no alcanza con tocar el precio del dolar como para transformar una estructura productiva de desquilibriada a equilibrada.

¿Iremos convergiendo al Consenso del Bicentenario?

Happy Pesaj y/o Pascuas, según corresponda.

Atte

Ele

lunes, marzo 22, 2010

Inflación Verdadera

Alguna vez recuerdo que dijo Heyman "El problema del TCR alto es cuando los no transables corren a buscar a los Transables"

El siguiente gráfico describe la evolución desde 2005 a la fecha del precio per cápita de la canchita de futbol donde Elemaco y los muchachos despuntan el vicio todos los domingos.

Si en 2006 y 2007 alcanzaba hacer un ajuste por año. en 2008 hicieron falta dos y en 2009 tres. Cualquiera que haya escuchado a Frenkel diéz minutos, reconocerá en el patrón que se observa como, sin prisa y sin pausa, Argentina se encamina hacia un Régimen de Alta inflación.

La inflación, como también explicaba Heyman, es siempre del 5%...lo que cambia es cada cuanto.

Así estamos.

Feliz Lunes

jueves, marzo 18, 2010

Estamos todos

Ahora si, arrancó la BEA. Bienvenido Levy Yeyati a la Blogosfera Económica Argentina

martes, marzo 16, 2010

¿Quién Lo Dijo?

¿Fuí yo el que dijo esto? ¿seguro? a mi no me parece. O ¿habrá sido él?. Mmm... la verdad, no lo sabemos.

Pero, antes de avanzar un poco más, hagamos un pequeño interregno. Al parecer, a amigo Postino no le cerró mucho el estimador de Utilización de Capaciada Instalada (UCI) de nuesto post anterior, entonces para ampliar el cuadro, actualizamos un viejo excel que andaba por ahí.

Básicamente, calculamos cuál es el nivel de producto máximo para cada año desde 1990, sí la tasa de desempleo fuese del 5% y la utilización del stock de capital total de la economía del 75%. Estos valores son arbitrarios ya que sólo buscamos darnos alguna referencia para guiar el análisis, ya que como bien comentaba Hector en algún post anterior, el máximo de utilización del total de factores disponibles es inherentemente inobservable. El gráfico que sigue muestra la dinámica del PIB efectivo* y el potencial aquí estimado:
Estimado de esta forma, podemos definir el nivel de UCI de toda la economía, como la relación entre el PIB observado y el PIB potencial. De acuerdo a esta formulación, resulta evidente que dadas las tasas de desempleo existentes durante los noventa, los máximos de producción de la convertibilidad se dieron con niveles de utilización bajos. Asimismo, la UCI alcanzó en 2008 un máximo de 97,1%, para caer en algo más de 5 p.p. durante 2009.Un punto de nuestra definición de "PIB potencial" que puede molestar a los amigos liberales y ortodoxos es que se excluye toda referencia a la tasa de inflación para las cuentas. Hoy en día, la moda dicta que el máximo de producción sostenible, es aquel que no acelera la tasa de inflación. Respecto de este punto, nuestro gráfico que sigue muestra la relación entre PIB e inflación. Sin bien son pocos datos, y la correlación parece nada robusta, se observa que desde 2006, el sostenimiento de altas tasas de utilización de la capacidad se dieron en compañía de mayores y crecientes tasas de inflación:Vale notar que a diferencia de lo que parece indicar Elemaco aquí, la oferta total de la economía no es una cosa fija, sino que esta evoluciona en el tiempo. Incorporando una variación en el PIB potencial del 3% para 2010, llevar los niveles de utilización al 100% (esto no ocurre en toda la serie de los últimos 20 años) implicaría un crecimiento real del PIB del 11-12% en todo el año. Claramente, si la correlación se sostiene, esto sería acompañado por una fuerte aceleración en los precios.

La pregunta que me sigo haciendo es, sí tiene sentido impulsar la actividad económica fuertemente desde el sector público, cuando en medio de una fuerte inercia inflacionaria, el PIB igual estaría creciendo cerca de un 5%. O dicho de otro modo, si no será que todo el impulso fiscal se lo comerá una mayor tasa de inflación.

Saludos,
Genérico

* Al PIB efectivo de 2009 lo hicimos caer un 3% anual.

lunes, marzo 15, 2010

La macro no se negocia

Mis tres años de práctica profesional, cuyo inicio coincide, minutos más minutos menos, con el momento en el que abrí este blog, me han convencido de algo. La teoría macroeconómica funciona. Hay, como diría el Pepe Mujica, un par de reglas macro que no sólo son conceptualmente intuitivas sino empíricamente ciertas. La micro la charlamos, la macro no se negocia.

Una de esas reglas es que existe un límite a la capacidad de la política expansiva (fiscal y monetaria) para impulsar la actividad económica. El límite es físico. La estructura productiva no puede siempre pegar saltos caprichosos hacia adelante. El límite no sólo está en la disponibilidad de insumos de producción (mano de obra, capital, energía, materias primas, etc) sino en el tiempo que necesita el sistema para reasignar los recursos.

Una economía llegando a su límite se manifiesta de dos maneras: inflación e importaciones. Viendo la combinación de ambas series para Argentina y la evolución de los indicadores de empleo que, desde principios de 2007, no mejoran ni un centímetro, hay indicios claros de que cerca de esa fecha, Argentina alcanzaba el límite
(Nota, la serie oficial de desempleo de la EPH tiene dos feroces dibujos en los valores de 2007q4 y 2008q4. En breve subo un post justificando la corrección que muestro en el gráfico)

Todo sería mucho más complicado si el rebrote inflacionario e importador no coincidiera con un impulso fiscal y monetario fuertísimo en una economía no muy alejada de su “producto potencial de corto plazo” (que no se cual es pero sé que está ahí). Podría, si las relaciones más elementales de la macro no se cumplieran, recurrir al argumento de los oligopolios, al del precio de los commodities o al reacomodamiento de precios relativos. Pero no. Están ahí. Se cumplen. O, mejor dicho, o se cumplen o la coincidencia es sorprendentemente oportuna. (click para agrandar)

Así, desde 2007 (con excepción de 2009 cuando la brecha en el producto reapareció), entramos en un sendero de políticas expansivas con bajo impacto en la actividad económica.

El problema es que los costos de buscar violar esa primer regla de la macro no se limitan a la inflación o a las importaciones, lo cual nos acerca a la segunda gran regla macro. La política fiscal está vinculada con su propio pasado y con su futuro o, como decimos los economistas, requiere cierta consistencia inter-temporal. El vínculo es relativamente simple. Independientemente del impacto que tenga sobre el producto, un año podes gastar sin financiamiento genuino, pero la capacidad de financiarte se complica a medida que mantenes el comportamiento irresponsable en el tiempo. Eventualmente chocas con el default o, sobre todo, con el  impuesto inflacionario..

Los seis años de gobierno de matrimonio Kirchner coinciden con el del mayor aumento en los recursos del sector público nacional de toda la historia económica argentina. Vean el siguiente cuadro, donde no se tienen en cuenta aquellas presidencias de menos de un año. Nunca como en la actual una gestión vio incrementarse tanto sus recursos respecto a la anterior. Los 3,5% de recursos adicionales promedio (que esconde una suba de 4.5% de 2003 a 2009) se ve secundado tan sólo por el 1.89% adicional de Ongania-Lanusse, el 1.83% de Illia y el 1.59% de Alfonsin (que tuvo su primavera).

Sin embargo, y a pesar de este fenomenal e inédito crecimiento en los recursos, la gestión K ha puesto nuevamente en jaque la consistencia intertemporal fiscal, impulsando a una economía que ya no muestra una brecha demasiado importante entre su producto efectivo y potencial.

El gasto total creció de $ 131 MM en 2003 a $ 267 en 2009 (en pesos de 2009). Sabemos adonde fue la plata. 1 de cada 2 pesos de destinaron al vergonzoso esquema de subsidios que buscó sostener ese mundo virtual y mediático de tarifas bajas y combustible barato. La pregunta es ¿De dónde sacó el ejecutivo los $ 136 MM adicionales?

Existen cuatro y tan sólo cuatro formas de financiar el gasto público (si encuentra una quinta, habrá violado la primera ley de la termodinámica). A saber, en orden decreciente de sostenibilidad (i) impuestos (ii) endeudarse (iii) emitir moneda y (iv) liquidar stocks (por ejemplo, privatizar). Todas tienen su analogía en algún movimiento contable (si cae el patrimonio neto o sube el patrimonio neto o cae el activo o sube el pasivo). En el siguiente cuadro podrá ver cuál fue la composición del financiamiento entre ambos períodos.

De los $ 136 MM:
1) $ 4 MM (3%) surgieron del flujo de ahorro que el gobierno tenía en 2003

2) $ 50 MM de ingresos tributarios (37%), la que personalmente considero la fuente más genuina de ingresos. De ellos, $ 8 MM pueden atribuirse al aumento de las alícuotas de retenciones de 2007 que, aunque polémicos, creo que corresponden también a la categoría de “genuinos”

3) $ 51 MM (38%) llegan de las contribuciones a la seguridad social, donde $ 6 MM corresponden a la estatización de las AFJP (su flujo, y no su stock) que, aunque también polémicos, son genuínos. $ 5 MM (4%), sin embargo, son ingresos transitorios que tenderán a desaparecer desde 2011, de jubilados que pagan cuotas por la moratoria previsional de 2006.

4) $ 23 MM (17%) corresponden a diversas formas del impuesto inflacionario y al pago que el FMI nos hizo hacia fines del año pasado. Puro financiamiento transitorio, espurio y regresivo.

5) $ 7 MM (5%) restantes fuero liso y llano desahorro

Note el lector como la suma del desahorro, el impuesto inflacionario y la moratoria previsional alcanza los $ 35 MM. Así el 25% del incremento del gasto público y 13% del gasto total es financiado a partir de recursos “no genuinos” y/o transitorios, lo cual inevitablemente genera un problema intertemporal.

¿Es esto un problema serio? No debería serlo, pero lo es. 2.5% puntos del PBI de colocaciones en los mercados durante un par de años no genera ningún problema de sostenibilidad en una economía creciendo al 3%/4% pero, como sabemos, el segundo tipo de financiamiento, intervención del INDEC mediante, está hoy vedado.

En cambio, optamos por la vía inflacionaria, la tentadora y regresiva vía inflacionaria.

Y así, la castidad de las reglas de la macro descansan invioladas y los cauces naturales siguen su camino. La inevitable jaqueca de domingo de una expansividad innecesaria y esteril nos arrincona en las siempre poco felices opciones que nos deja la realidad de una economía que, si uno la dobla demasiado, se rompe.

La solución, por suerte, no parece ser demasiado compleja. “Descremar” un poco el gasto y reabrir los mercados voluntarios de bonos. La buena noticia es que en un año de 4%/5% de crecimiento la corrección de estos desequilibrio no debería traer problemas. La mala es que hay que apurarse, porque mientras nos peleamos por el FoBic se acerca 2011, y sus U$S 20 MM de vencimientos de la deuda.

Atte

Ele

sábado, marzo 13, 2010

Ternura canina descontracturante

Muy serio anda este blog ultimamente. Mucha economía, mucha crispación. Nada mejor que un poco de ternura canina para descontracturar.

miércoles, marzo 10, 2010

Cerrando Brechas

Una pregunta relativamente obvia de caras a 2010, es si existe la necesidad de seguir impulsando la economía por el lado del sector público. La otra claro esta, es como se financia esa expansión. Respecto del primero punto, nuestra posición había sido clara respecto de la necesidad de sostener el sesgo fiscal expansivo durante el año donde mayor impacto tuvo la crisis internacional.

Sin embargo, para el año en curso tenemos serias dudas respecto de la necesidad de seguir cebando la demanda por parte del sector público. Por ejemplo, informes que leemos por ahí, sostienen que para este año, la expansión del gasto privado será más que suficiente para garantizar un crecimiento del PIB superior al 5% anual. Nada mal.

Por eso, lo que sigue son una serie de cuentas "back-of-the-envelope" para cuantificar de algún modo más o menos claro cuál es el crecimiento "máximo" que podría implicar el choque fiscal en 2010.

Vamos por el principio. De acuerdo a los números de ESC(R), el PIB habría caído muy fuerte a partir del segundo semestre de 2008, y encontrando un piso durante los primeros tres meses de 2009. Así, y aunque en términos interanuales el producto cayó durante todo el año, la tendencia insinúa la recuperación para este año.
Las supply-side economics tienden a poner demasiado (todo bah!) énfasis en que el crecimiento de largo plazo esta explicado sólo por lo factores del lado de la oferta. Nosotros, por el contrario miramos otras cosas en este debate. Sin embargo, resulta relativamente evidente que aún cuando la demanda tire el crecimiento de mediano plazo, en el corto, existe una oferta que limita ese crecimiento. Por ejemplo, como muestra en el gráfico que sigue aún con todas sus contras, este esquema macroeconómico llevó la tasa de desempleo a valores inferiores a los dos digitos*, y si bien la crisis implicó una suba en el desempleo, este es todavía es bajo si se lo compara con la historia reciente.

Por otra parte, la utilización de capacidad instalada industrial** (o uso del capital) también mostró una contracción suave durante la crisis, pero se estaría acelerando de forma rápida en la primera parte del año revirtiendo esa tendencia y operando cerca de los máximos históricos para toda la serie desde 1988.
Hagamos entonces las cuentas tontas que dijimos al principio del post. Asumamos, en pos de la simplicidad, que la tasa de desempleo friccional es del 5%. Más allá de cualquier chamuyo teórico, para cualquier Gobierno llevar la tasa a ese nivel sería del todo un golazo. Postulemos además, que el promedio móvil 12 meses de la utilización de capacidad instalada no va más allá del 75%. Otra vez, todo un hito para la historia reciente.
El gráfico anterior muestra entonces, cuál sería la situacióna actual de utilización de los factores respecto de los valores definidos como "máximos". Se percibe claramente como durante el modelo convertible, el ""excedente"" de trabajo era brutal. Por otro lado, se entiende también, dada la capacidad ociosa, la época feliz del Kirchnerismo. Ahora bien, si medimos para el cuarto trimestre de 2009, la distancia entre los valores observados y los máximos nos da que la UCI esta un -3% y el empleo otro -3,1%. Por lo tanto, si asumimos que estas brechas se cierran en 2010, como máximo, se puede esperar un aumento del PIB algo superior al 6% i.a.

Claro, esto no es todo lo que impulsa el crecimiento. Podemos sumar a este 6% un nada despreciable aumento de 2% en el residuo, daría que el techo para el crecimiento de 2010 estaría en algún punto cercano al 8% i.a., sólo 3 puntos porcentuales por sobre la estimación de crecimiento actual.

Volviendo por un rato a la bandera sueca, ¿cuál es el impulso nominal que sustenta una respuesta adicional real de 3 p.p. del PIB? o siendo más específicos, ¿Hay, dada la situación actual de utilización de los factores, espacio para que exista alguna respuesta real al impulso nominal-fiscal?. Sabemos que sí la respuesta a esta pregunta es negativa, la resolución de todo el choque nominal será... nominal!

Dejando sólo un par de dudas. Os saludo.

Genérico.

* Todavía no me queda en claro si esta truchado o no el dato de desempleo.

** Idem con la UCI. En cualquier caso, sí la tasa de desempleo es más alta y/o la UCI más baja, más espacio para impulso monetario habrá... ¿o no?


viernes, marzo 05, 2010

Máxima

Creo que hasta ahora no lo había dicho en público. Pero esta cosa de Elemaco me hizo recordar mi ley motiv de 2010. Acá va:

"Todo aquel que use el término "crispación" para definir la actual coyuntura política, esta en las antípodas de mi posicionamiento ideológico"

Ya lo sabes Elemaco, vos, como Sam, sos contra mío.

Saludos y buen fin de semana.
G.

PD: ¿Y si volvemos a la economía y dejamos esto para charlarlo birra de por medio?

jueves, marzo 04, 2010

Crispación

No es la economía, ni "el modelo", ni el tipo de cambio alto, ni el déficit fiscal, ni la quema de recursos fiscales  caros para combustible barato, ni el impuesto inflacionario de 75% en 3 años, ni el INDEC, ni la crisis del campo, ni Moreno, ni los Skankas y Antoninis, ni las instituciones y la república, ni la estatización de las AFJPs, ni el Mercosur moribundo, ni las candidaturas testimoniales, ni los DNUs cambiando Fobic por Fo"v"ic, ni el futbol que garpamos todos. Todo suma, pero no es nada de eso.

Es ideológico. Es profundamente ideológico.

Y no es derechas o izquierdas, o tal vez si lo es, no lo sé. Tal vez siempre estuve equivocado con eso de las derechas e izquierdas. Tampoco es el rol del Estado en la economía, ni el republicanismo ni las instituciones. 

Es la visión radicalmente distinta de cómo funciona el mundo. La peor herencia de los k será el habernos acostumbrado al conflicto, convencido de que la polarización es necesaria, de que lo común es la suma cero y que la transición a ese mundo virtuoso es agresiva y "crispada".

En economía, como me enseñó el más vivo de los homos Hay almuerzos gratis. En economía pueden ganar todos,  hay complementariedades, externalidades, economías de escala, aprendizaje, producto ocioso, tortas que no solo se reparten sino que crecen, y crecen mucho. La contraposición de intereses, la dialéctica, está en todos lados, existe y se puede ver y tocar, pero es una parte minúscula, insignificante, de la dinámica que mueve al mundo. Es eso en lo que nos ponemos de acuerdo, y no lo que nos divide, lo que nos acerca al desarrollo.

Al menos eso es lo que me dice mi ideología, o mi fe, o mi religión. No lo sé. No necesita ser racional, ni siquiera consistente. Me alcanza con estar convencido, y hoy estoy convencido.

y si no es así...paren el mundo, que me quiero bajar

lunes, marzo 01, 2010

El impacto de la política social Kirchnerista


No le creo a las recientemente publicadas bases de la EPH. Ni un poco. Intuyo la manipulación, la huelo, la siento, pero no puedo demostrarla. Pululan indicios de alteraciones en casi cualquier cruce que se haga, como las inexplicables evoluciones del salario de los no registrados o de las tasas de actividad y empleo. Sin embargo, hagamos abstracción y juguemos a que les creemos* y a que las estimaciones que obtenemos a partir de la EPH valen. 

¿Cuál ha sido el impacto sobre la pobreza de las políticas sociales del gobierno?

El primer paso es estimar la pobreza actual. El insumo crítico para esta estimación es la Canasta Básica Total que determina a partir de que punto una familia es considerada pobre. No encontrando cálculos recientes de Artemio (la ultima que encontré fue de 2008) arriesgo mi propia estimación, que surge de combinar inflaciones provinciales, las estimaciones de Buenos Aires City y de inflaciónverdadera.com.  Los resultados se presentan en el siguiente gráfico.


Como puede observarse en el siguiente gráfico, para esa canasta básica la pobreza en el segundo trimestre de 2009 habría sido de 25,3%, casi el doble del 13% estimado por el INDEC (3.2 millones de personas). 


Extañamente, se produce, desde el segundo trimestre de 2008 y durante el año de la crisis internacional, una caída de la pobreza de casi 4% a la cual no le creo ni un poco. Sin embargo, y como todos son inocentes  hasta que se demuestre lo contrario, voy a dar esta caida por cierta y continuar, aunque asumiendo el compromiso de seguir quemando valiosas horas de ocio hasta encontrar y medir el tongo. (Algo encontré alrededor de las tasas de empleo e inactividad, pero sin evidencia concluyente, callo)  

Noten que no es para nada neutral la Canasta Básica utilizada. Si en vez de utilizar la que mostrara más arriba usara otra un 10% más baja, 950.000 personas sobre un total de 24.5 millones de habitantes (urbanos) dejarían de ser pobres (3,9%) y 750.000 personas pasarían a serlo si hubiese subestimado la canasta en 10%. 

No es el eje de este post, sin embargo, medir cuanto es la pobreza sino, en cambio, medir cuanto varió la pobreza, así que,  volviendo a lo nuestro ¿Cuál fue el impacto las políticas sociales de la gestión K?

Me centraré en las dos más importantes. La moratoria previsional de fines de 2006 (que aplaudiría hasta que me duelan las manos si no la hubieses podrido 20 meses más tarde con la estatización de las AFJP) y el ingreso universal a la niñez de fines de 2009 (que aplaudo sin peros).

Moratoria Previsional

Para medir el impacto de la moratoria previsional realicé una microsimulación de Montecarlo sobre las EPH. Según se ve en los propios datos, entre el IV trimestre de 2006 y el II de 2009 el número de jubilados crece un 39% (700.000 personas) como resultado de la moratoria que amplió sensiblemente la cobertura del sistema previsional. 75% de ese incremento, aproximadamente, se explica por mujeres mayores de 60 años que cambian su condición de inactividad desde amas de casa a flamantes jubiladas. El 25% restante son trabajadores mayores que dejan de estar activos y se retiran.

El ejercicio para medir el impacto de la moratoria es simple. (1) De manera aleatoria, en cada periodo quito a un número de mujeres jubiladas mayores de 60 años su ingreso por jubilación y las regreso a su condición de amas de casa. El ejercicio se realiza de manera tal que el porcentaje agregado de mujeres jubiladas vuelva a ser el previo a la moratoria previsional (61%). (2) Hecho esto, calculo el nuevo ingreso del hogar y reestimo la tasa de pobreza (3) repito (1) y (2) 100 veces y tomo el promedio de las tasa de pobreza obtenidas. La diferencia entre ese valor y la pobreza original representa el impacto de la moratoria previsional.

Ingreso universal a la niñez

Para medir el impacto de la Asignación Universal simplemente incremente el ingreso en $180 por menor (hasta un máximo de 5 menores) para aquellos hogares que tuvieran un/a jefe de hogar:

1) Desocupado/a
2) Ocupado/a en negro con ingreso laboral menor a $ 1800 (use un valor mayor al que rige en el plan para incluir a aquellas personas que entran igual aunque no cumplan el criterio)
3) Ocupado/a cuentapropista con ingreso laboral menor a $ 1400
4) Ocupado/a en servicio doméstico

Esto me da un total de un millón de personas viviendo en un hogar donde se recibe una asignación (en una cantidad de hogares que no puedo medir porque las nuevas EPH no traen el ponderador de hogares). De este millón de personas, el 60% pertenece a un hogar pobre (el 40% restante posiblemente se encuentre sólo ligeramente por encima de la linea de pobreza). Asi medido, el monto total repartido en concepto de asignacion universal ascendería a $ 4.8 mil millones de pesos anuales.

(Tener en cuenta que esto corresponde tan sólo a la proporción de población urbana, y no considera a los 16 millones de habitantes rurales)

Resultados

Los resultados de ambas estimaciones pueden verse en el siguiente gráfico: (corrí el ingreso universal desde fines de 2008 para que el efecto pueda verse)

Combinadas, ambas políticas indujeron una caída directa de 3.5% en la tasa de pobreza, 1,2% atribuible a la moratoria previsional y el 2.2% restante al ingreso universal. 860.000 personas sobre un total de 6.5 millones de pobres urbanos** (13%) cruzaron la línea de pobreza como resultado de una transferencia directa del Estado

Nada mal, ¿No?

No tenemos todavía estimaciones del impacto en términos de la distribución del ingreso, que prometemos vendrán en breve. La estimación realizada no cambia sensiblemente si utilizamos una Canasta Básica distinta. Para estimaciones con precios 10% por arriba o por abajo del utilizado las diferencias eran despreciables.

Ojalá el Kirchnerismo fuera sólo esto, ¡Con qué alegría lo votaría a Nestor en 2011!

Atte

Ele

*La corrección de la aparente sobreestimación del ingreso de los no registrados, no incluida en las estimaciones de más arriba representa entre 0.5% y 1.5% de pobreza.

**Las estimaciones se realizan sobre un total de 24.5 millones de personas cubiertas en el universo de la EPH.