martes, abril 29, 2008

¡Eppur si muove!

Por Elemaco:
Para ser sincero, debo admitir que existe una visión del mundo según la cual el modelo económico de Nuestra Presidenta y el Primer Caballero es consistente consigo mismo.

En una versión simplificada de esta Macrovisión, el crecimiento no genera inflación. Simple. El aumento de la demanda no es inflacionario, porque "la economía es elástica" (ver segundo comentario acá). La ley de conservación de la energía no aplica para imponer restricciones físicas a la aparición de los bienes que la pujante demanda reclama. La curva de oferta, en este contexto, es completamente horizontal y el principio económico fundacional según el cual existe una relación positiva entre demanda y precios no aplica.

A partir de allí, todo impulso inflacionario es el resultado de un complot desestabilizador o, siendo menos rimbombantes, de la codicia desmesurada. Grupos concentrados con poder de mercado buscando rebanar una tajada más grande que la que les correspondería en un contexto "más competitivo". Como cada uno solo controla un precio, la única forma de ganar posiciones frente a los demás es aumentándolo, ergo, generando inflación, que se retroalimentara cuando la contraparte perjudicada busque recuperar posición.

En otra versión menos simplificadora, a la curva de oferta se le permite cierta pendiente positiva, que, sin embargo, siempre podrá ser compensada con un retoque en los márgenes, en las rentabilidades relativas, que la planche de nuevo.

Así, la economía queda reducida e incluida en su conjunto a una subesfera de la política, a la lucha de poderes, donde al resultado final dependerá de la relación de tamaños relativos. "A la môrené", como dicen los franceses, el que la tenga más grande se llevara una tajada mas jugosa.

En este contexto, la política antiinflacionaria optima se llama Moreno y, como estrategia sensata de mediano plazo, la acumulación de poder. Enfriar la economía seria equivalente a amputar la pierna por un dedo mocho. Daño colateral altísimo e innecesario. ¿Para que someter a la población a un menor crecimiento, poniendo en riesgo mi estrategia de mediano/largo plazo? Obviamente, con el enfriamiento, los grandes grupos monopólicos también se verían afectados y la inflación caería pero ¿A que costo? ¿Y la gente? ¿Y los niños? ¡Que alguien piense en los niños!

Esta visión, que no me animo a afirmar sea absolutamente invalida, es más factible cuanto menor sea el área de influencia. Sin embargo, aquello que posiblemente haya sido cierto en una provincia de 250.000 habitantes difícilmente pueda extrapolarse acríticamente al resto del pais.

Con este bagaje en mente, se van explicando de a una las inacciones del ejecutivo en materia de política económica. El avance del MERCOSUR no puede ser mas que una retórica. Si creo que el mundo funciona exclusivamente de esta forma, la integración internacional seria suicida. Una contradicción en los términos. Implica sumar cientos de nuevos jugadores, muchos de los cuales probablemente la tengan más grande que yo (¡Y mas si tu FTA es con Brasil!). La política industrial es un juego para que se diviertan los chicos mientras los grandes trabajan acumulando poder, el federalismo fiscal atenta contra la estrategia de largo, la reforma tributaria y la eficiencia del gasto se conveirte en chamuyo de economistas desestabilizadores que no ven que la distribución primaria la determino yo, ¡YO! and so on , and so on, and so forth.

Lastima que la única verdad sea la realidad, que la gente responde a incentivos y que todo cuerpo que se sumerge en un liquido ejerce un empuje de abajo hacia arriba igual al peso del liquido desalojado, aunque el ejecutivo decrete los contrario.

¿Cuál es el riesgo de un diagnostico equivocado? ¿Cuáles las contraindicaciones si el medicamento está mal recetado?

Hay un principio claro que no debemos olvidar. No estamos, y mas allá de voluntarismos, inmunes a un palo. No por nada Argentina es el país mas volatil del planeta, el que mejor domina esa alquimia que transforma ilusiones en desencantos.

Forcemos, devaluando, el tipo de cambio real y corremos un riesgo explicito de espiral inflacionaria. No frenemos a tiempo y nos arriesgamos al palo recesivo. No estoy deciendo que vaya a pasar, sino preguntando ¿Podemos darnos el lujo de equivocarnos?Parafraseando a mi coequiper Genérico, intento una respuesta: fracasar es fatal. Un “¿Ups! Perdón. Me equivoque” mientras encaro al helipuerto no compensa el tendal de heridos.

Recuerde que una crisis no la paga usted, que puede darse hasta el lujo de leer un blog, ni yo, que aprovecharé para comprarme un departamento al 25% de su precio, ni siquiera nuestros dirigentes si tienen que partir apresuradamente a sus confortables estancias calafatenses, sino el tipo que acaba de salir de la pobreza, ese que acaba de entrar fruto de 5 años de 9%. Para el 25% que todavía quedo afuera, bueh, que dios se apiade de sus almas.


Atte

Elemaco

lunes, abril 28, 2008

¿Quién vió un Dólar?

Por Genérico

El argumento parece estar en boga últimamente. En un post anterior, Kaloma (a quien debo otorgar el hecho de haberlo hecho rodar por estos pagos) postuló que para “cerrar” el modelo, el Tesoro debería comprar todos los dólares excedentes en el mercado de cambios. Larry, por su parte, siempre defendió que este modelo depende del Superávit Fiscal (SF) y Rollo también metió un comentario al respecto.

¿De donde viene este argumento? Hasta ahora (bueno, hasta la corrida del viernes y salteando el epicentro de la crisis subprime) la cosa seria así. Todo exportador y todo importador esta obligado a pasar por el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC). De esta forma, cuando los ingresos de USD exceden las salidas, existe una tendencia a la apreciación del TCN. Dado que el BCRA sostiene el TCN cerca de un valor objetivo (el amigo Hernán Pérez insiste en que la política es de acumular reservas. ¡Bonito eufemismo!), interviene emitiendo los pesos necesarios para satisfacer la demanda del sector privado. Claro, aquí se genera una monetización de la economía que puede forzar el alza de precios. Entonces, el BCRA emite deuda (Lebacs y Nobacs) con el fin de retirar dinero de la economía. El efecto neto de la operación se conoce como intervención completamente esterilizada.

Ahora bien, ¿por qué si el efecto neto de la intervención es (casi) neutro algunos insisten en que esto es inflacionario? O análogamente, ¿por qué si el Tesoro compra los dólares –no existiría nueva emisión- esto contribuiría a desandar la espiral inflacionaria?.

Primero habría que decir que lo que hace ahora el BCRA es expansivo y por lo tanto, es inflacionario. La clave estaría no en ver el efecto neto de la operación, sino el paso a paso. En primer lugar cuando se venden los dólares, el sector privado esta demandando pesos. Cuando el BCRA convalida y vende se incrementa en consecuencia la liquidez del mercado local. Como contrapartida de esta operación puede verse un mercado súper líquido con bancos que pagan nada por tomar depósitos, que sin embargo crecen y crecen.

Luego, el BCRA neutralizara la expansión inicial a través de la emisión de deuda, que sera comprada, justamente, por estos hiperlíquidos bancos (con el Nación a la cabeza). Así el esquema opera con pesos que, al entrar e impulsar la demanda en una economía cerca del límite de su capacidad, primero fuerzan los precios al alza y luego llegan a los bancos, desde donde el BCRA lo retira. Dicho de otro modo, quién recibe el peso y quién lo entrega no es la misma persona.

¿Qué pasa si cambiamos el punto inicial? ¿A donde nos vamos?. Al ser el Tesoro y no el BCRA quién compra los dólares, se mantiene inalterada la demanda de dinero del sector privado pero cambia la del sector público. Luego, si esos pesos van a un fondo anticiclico o algo por el estilo, tampoco volveran como crédito. Eventualmente, la liquidez del mercado local se reduce, los bancos al ver que los depósitos no crecen , subiran las tasas pasivas (no como instrumento, sino como consecuencia) lo cuál, a su vez, inducira un cambio en la demanda de dinero del sector privado, reduciendo la demanda de pesos, bajando el gasto privado y aumentando el ahorro.

Sin embargo, tengo que apuntar algunas cosas que no me cierran de esta lógica:

1. Si algo de lo que dijimos es cierto, entonces comprar o no comprar lo dólares es trivial. Si el tesoro incrementa el superávit en un monto equivalente al necesario para sostener el dólar, ya estamos en la misma.

2. Rollo dice que todo lo que dijimos esta mal. Honestamente, no entiendo mucho ese post. La clave sería que el superávit baja los pesos en manos del sector privado sin que haya cambiado la demanda de dinero. Luego, los privados volverían al MULC a vender dólares para hacerse de pesos forzando aún más el TCN. Ahí está el perro que se corre la cola con el Tesoro subiendo el superávit por un lado y dando pesos por el otro. Puede ser que sea así (no estoy seguro), pero si es así, el mercado estaría cada vez menos líquido, lo cuál incrementa los rendimientos del mercado financiero local cambiando la demanda de dinero del sector privado.

3. Claramente, esta política la pega al producto y a la inflación por la reducción del crecimiento en el gasto público, lo que para muchos es un ajuste. Si será o no regresivo es harina de otro costal. Lo que sí hace es decir que la economía va a gastar menos y que el Estado no va a utilizar esos recursos excedentes para gasto social o infraestructura, al menos, el corto plazo.

4. Esta política no hace nada contra el shock de precios internacionales ni contra la inercia inflacionaria que implica la política de TCR. Tampoco opera sobre la distribución. Si le pega a los precios es en los no transables.

Y ustedes me dirán, pero Generico, amigo del alma (ando buscando afecto) ¿que mierda queres decir con todo esto?. Bueno, lo primero sería lo siguiente. Por más que me lleve el mote de ajustador serial, creo que el incremento en los precios requiere de algún manejo macro de corto plazo (lo cuál no inválida la necesidad de micro en el mediano).

Evidentemente, no existe una política óptima de intervención, o una en la que todos ganen. De todas las mencionadas, el incremento del superávit (por un monto equivalente al saldo del MULC) contribuye a reducir el gasto agregado, a incrementar al ahorro y a reducir la liquidez sin usar la política monetaria y sin que ex-ante esto sea regresivo. Una especie de mix, no muy de manual, pero disponible para el gobierno… ahora, en los últimos días, me insisten en que esta política en el mejor de los casos, es trivial y yo no veo por que. Tal vez, alguno, me pueda dar una manito.

Saludos

G.

viernes, abril 25, 2008

Fin de semana

Por Elemaco:

Lo grave, lo verdaderamente grave, lo trágico, lo desesperante no es la inflación, no es la desigualdad, ni la pobreza, ni el desempleo, ni la oportunidad perdida ni la falta de un plan de desarrollo.

Tampoco es que el gobierno no encare las políticas necesarias para dejar atrás esos problemas de este modelo que no es lo que es, ni lo que no es ni lo que podría ser.

Lo que más me deprime es que personalmente ya empiezo a creer que es probable nuestros gobernantes no los vean o incluso peor ,que no les interese verlo. 5 años al 9%, inflación al 10%, desempleo al 7%. ¡‘tamos bárbaro, muchachos! ¡Vos no le des bola a lo’ giles esos! !No hay nada mas elástico que la economía¡

Les deseo a todos un fin de semana

Elemaco

martes, abril 22, 2008

¡Chancho limpio nunca engordaaaaaa!

Por Elemaco:

¡¡¡Paaaaaaaaareeen las rotativas!!! ¿Subsidio al transporte de granos para el NOA y NEA? ¡No, muchachos! ¡No! No entendimos nada.

Mejor empiezo por el principio.

La industria porcina viene creciendo, como se dice en la jerga técnica económica, como loco. El chancho es, desde la década del 80, la carne más comida en el mundo. Hoy, el consumo de carne chanchuna es un 50% más alto que el de polluna y 75% superior a la vacuna. Su comercio internacional alcanza los U$D 20.000 millones.


Una tonelada de chancho cuesta alrededor de U$D 2.000, las tres toneladas de maíz (insumo principal por afano) necesarias para producir una de chancho cuestan, a precion internacional, U$D 750. El chancho chorrea valor agregado desde todos sus poros, y de alli, según me comentaron algunos técnicos, la particularidad de su olor.

Usted pensará "Obviamente la Argentina tiene un potencial infinito para copar este mercado. Alimento barato (maíz, soja, etc), buen clima, mucha agua, mano de obra calificada" y no se equivocará. Sin embargo, la realidad se empeña en hacer lo que quiere y no lo que debe. Vea, si no me cree, el siguiente gráfico.

La industria porcina argentina, entre 1979 y 2007 exportó un acumulado de CERO toneladas de cerdo. ¡Cero! En 2008, hito histórico después de 29 años, exportamos 27 toneladas! 27.000 kilos (aunque importamos 27.000 toneladas)

Brasil, en tanto, pasó de prácticamente cero en 1991 a 770.000 Toneladas en 2007. Hoy es el 4to exportador mundial después de Estados Unidos, Unión Europea y Canadá, con una tajada del 15% del total (¡Si! El 1er mundo exporta alimentos). En valor es algo mas de U$D 1.500 millones. Para poner mas en perspectiva diré que es equivalente a todas las exportaciones del complejo siderúrgico argentino, un 50% superior a las de todo nuestro complejo forestal, dos veces y media el vitivinícola y la mitad de las exportaciones del complejo ensamblador automotriz compensado.

¿No se deprimió al ver como os mais grandes du mundu nos pasan el trapo? ¡Si el siguiente gráfico no lo shockea, entonces usted no tiene corazón!



La poco schumpeteriana industria porcina argentina sirve como doble ejemplo de cómo el mercado funcionando solo no llega a un equilibrio socialmente óptimo y, por otro lado, de como el gobierno puede, al intervinir, empeorar las cosas.

En el mundo sigue una tendencia muy marcada hacia, por un lado, la intensificación de su producción y por otro la relocalización hacia regiones marginales, donde la competencia con la agricultura es menor. En Estados Unidos, por ejemplo, donde se (sobre)estima que la industria porcina genera medio millón de empleos, la producción pasó del tradicional cinturón maicero a los estados del este. En Brasil, el 20% del Stock porcino y mas del 60% del crecimiento de los últimos 4 años se explican por Santa Catarina, un estado que produce sólo el 4,5% de la producción brasilera de maíz y soja.


Pero el ejemplo para entender la metida de pata del gobierno con su subsidio al transporte es Canadá. Hasta 1995, Canadá pagaba un subsidio al transporte de granos a los productores de regiones alejadas de los puertos, en particular en Manitoba y Saskatchewan, estados del centro de Canadá alejados de los núcleos productivos del este y oeste.

En 1995, y luego de debatirse en el “Canadian Pork Council”, deciden eliminar el subsidio, adelantando en cash al productor el equivalente a dos años para incentivar su transformación. El impacto en la producción agregada de chanchos en Canadá, explicada casi exclusivamente por Manitoba y el estado impronunciable, puede verse en el siguiente gráfico.

El mecanismo que explica el fenómeno es bastante simple (y lo explicaba el abuelo acá). La distancia al puerto actúa como una protección “natural” para la industria porcina. El maíz es mas barato en el NOA que en Zona Núcleo, así como el precio de la tierra. Pagar un subsidio al transporte de granos, además de aumentar la demanda de camiones amigotes y drenar escasísimos recursos fiscales, crea una ilusión innecesaria. Es hacerle creer al tipo que produce en el NOA que es igual al de Pergamino, pero la cruel y triste realidad es que, por definición, el NOA es el NOA y Pergamino es Pergamino.

Así, el subsidio que anunciaron el viernes no solo no “crea valor”, sino que destruye los incentivos para crearlo. Cada uno de los pesos que se va a (mal)gastar en corregir la meresunda de las retenciones podría destinarse, en cambio, a corregir las fallas de mercado de esta (u otra) industria incentivando no solo la agregación de valor, sino la incorporación tecnológica , el desarrollo regional, la diversificación productiva, la creación de empleo, and so on and so on.

¡No queda otra¡ Si queremos desarrollarnos hay que mancharse, como las publicidades de Blanco Ala. Meterse en el barro. Hay que ir a lo micro, ver un sector, encontrar la falla de los privados, corregirla y pasar al siguiente. Con muchos pequeños aciertos avanzamos y, sino, estamos fritos. Con tipo de cambio alto solo no alcanza, muchachos. La macro es necesaria pero no suficiente, pero es cierto, ¡Al menos no mancha!

miércoles, abril 16, 2008

To be or not to be

Por Genérico:

Alguna vez, dos economistas argentinos, escribieron un manual de macro motivados por la simple idea de que en Argentina la política monetaria no altera las tasas de interés relevantes para el consumo y para la inversión, sino que influye sobre la economía únicamente a través del tipo de cambio. No tuve el placer todavía de leer ese libro y no sé bien en que contextos vale esa afirmación. Quizás sea por ello sigo obsesionado con una estúpida pregunta:

¿Puede usarse la tasa de interés como instrumento anti-inflacionario en la Argentina de hoy?

¿Que nos diría el manual (no el de Rollo, claro)?. La tasa de inflación y las tasas de interés tienden a estar inversamente relacionados. Es decir, si la inflación es elevada, el incremento en las tasas actúan contrarrestando ese alza, vía reducción del gasto agregado de la economía (Escriba, tenga un poco de contemplación). Evidentemente, la inversa también aplicaría.

Pero esto no termina ahí. Por lo general, en el bendito curso Econ 101, existe una tasa que comanda todas las demás, y que justamente es la tasa que controla el Banco Central, siendo el ejemplo más claro las federal fund rates de la Fed.

Años más tarde, en cualquier curso de Dinero o Teoría Monetaria se estudia como las tasas afectan la economía, cuales son los "Canales de trasmisión". Sólo por citar algunos casos están los canales de Mishkin o el del crédito de Bernanke y compañía.

Empiezan los problemas cuando pasamos del manual al hacedor de politicas. Sólo diremos que, si en Argentina esos canales existen, son batante débiles y no creo que nadie seriamente pueda opinar la contrario. Tanto que hasta el bueno de Hernán Pérez lo cree así.

¿hay en Argentina una tasa de política relevante? Mi respuesta es que NO. Existen tasas que controla el BCRA y que pueden afectar de alguna forma no muy directa otras tasas que deberían afectar el consumo y la inversión, pero también vemos que los cambios en las tasas relevantes no responden necesariamente a cambios en las política del BCRA. Dicho de otra forma, no existe para el BCRA una tasa bajo su control que comande el resto de las tasas de la economía. Y si la hay, avisen en Reconquista 250.

Independientemente de todo lo anterior ¿Estamos de acuerdo en que si se elevan las tasas de interés pasivas habría impacto cierto sobre el consumo primero y los precios después?

La economía actual parece estar muy líquida y, dado que el argento es un inversor muy poco sofisticado, el plazo fijo con rendimiento reales negativos no hace más que inflar el consumo. Ofrecer alternativas de inversión rentables, podría desincentivar el consumo a favor de un mayor nivel de ahorro.

Tiendo a compartir algo más la idea de que incrementos en las activas tendrán un impacto todavía menos cuantificable aún sobre la inversión. En nuestra economía, el financiamiento vía crédito es bajo (de hecho, puede reducir el crecimiento del consumo encareciendo el crédito Garbarino… y no sé por que esto será regresivo).

Finalmente tenemos la cuestión del nivel de tasas. Por lo general, el uso de la tasa como instrumento de política asume algo de sintonía fina, de muy difícil aplicación en Argentina. Suponiendo que el BCRA puediera elevar las tasas pasivas y que al hacerlo logra influir el nivel de gasto agregado. ¿A cuánto debería llevar esos rendimiento? Dado que en la actualidad la inflación parece se nos va del 20% hacia el 30% y las tasas de los bancos andan bien planchaditas cerca del 8%-9% nominal anual, llevarlas en términos reales a terreno positivo sería un “pequeño” ajuste de 20 puntos básicos.

No quiero dejar este gran exabrupto insustancial sin antes apuntar una cuestión más. Asumiendo que el gobierno decide y logra (cosas difíciles ambas) subir los rendimientos del mercado local ya que no quiere modificar la actual esquema cambiario. Al hacerlo pondrá un incentivo importante para el ingreso de capitales especulativos de corto, lo cuál, complicará aún más la actual política monetaria (y por supuesto, el objetivo cambiario). Y hasta el más optimistas de la intervención completamente compensada sabe que, a pesar de existir un exceso de oferta de divisas, esta política tiene límites ciertos.

En definitiva… no tengo el “con qué”, tampoco tengo el “como”, y a la vez me falta el “cuanto” y el “por cuanto”.

Pero entonces, ¿quién podrá defendernos?... ¿el tipo de cambio nominal?.

Ufff… me fuí.

Generico

PD1: Ya que estamos de mangazo, Rollo, ¿como sería un esquema de inflation targeting si la tasa de interés no es relevante? ¿como sería ese esquema para una economía cuyo equilibrio externo, fiscal y el nivel de empleo (entre otras cosas) dependen del tipo de cambio?

PD2: Igual, hasta que no se corrija la burda manipulación del IPC, todo, pero todo, es trivial.

PD3: Se agradecen todos los comentarios y sugerencias de L.Maco. Todos los errores u omisiones son de su absoluta responsabilidad.

lunes, abril 14, 2008

Rewind al 10 de Marzo de 2008

Por Elemaco:

Aprovecho la afluencia de gente a la blogosfera que provoco la crisis del campo para hacer un refrito. Abusaré, y pido disculpas por ello, del recurso de la Auto-cita.

Empiezo por el final: "El" problema de la Argentina no es el campo, las retenciones ni la explosión desde el 11 de Marzo. Esos son un problema serio desde lo institucional, desde lo político, pero desde lo económico y social es de una relevancia marginal.

Para no relativizarlo tanto, diría que es un problema de orden ocho después de los otros siete que son los que realmente deberían preocuparnos.

Parémonos en el 10 de marzo. El campo puteaba pero no cortaba rutas y todavía estábamos a la espera de la primera medida económica del flamante ministro Lousteau.

Este día, y a pesar del empeño casi obsesivo por convencernos de los contrario desde las esferas oficiales, el "modelo integrador de tipo de cambio alto" hacia agua al menos desde tres puntos de vista, a saber a) desde lo que decía ser b) desde lo que podría haber sido y c) desde lo que no era.

El agua desde lo que decía ser entraba por la inconsistencia entre la política macroeconomía que se decía defender y lo que realmente se estaba haciendo. El tipo de cambio alto requiere excluyentemente ahorro interno que lo sostenga, provenga este desde el sector privado o del sector Publio. El producto a distribuir es uno solo (Y=C+I+G+X-M). Si le damos una señal a la economía para que mire hacia el exterior o ajustamos la absorción interna o el tipo de cambio real solito vuelve a bajar, por mas fuerza que hagamos en sentido contrario. En otras palabras, si en un modelo de TCR alto y competitivo los precios de los no transables van a buscar a los transables, ud tiene un problema.

Las tasas de interés reales negativas y una política fiscal ultra expansiva, amparada bajo el pobre slogan "Estaba en año electoral ¿Querés que vaya en contra de mi naturaleza?" van en contra de la consistencia interna del modelo.

¿Dónde se ve la inconsistencia? Inflación = 20% y acelerandose. Para mayores pruebas, dése una vueltita por el Ministerio de Trabajo para ver como andan las negociaciones colectivas. Caso cerrado.

Al no ser lo que dice ser, falló también en alcanzar lo que podría haber sido. Negar las mejoras en materia de creación de empleo rozaría el fanatismo opositor. La combinación de políticas fiscales, monetarias y cambiarias expansivas tienen que crear empleo, mas aun al partir del "infierno" del que partimos. El derivado aumento de la masa salarial, por su parte, contribuyó a una feliz baja en la pobreza.

Hasta ahí las loas (soy conciente de que me estoy quedando corto con los elogios, pero sabrá el lector entender que el recurso es necesario para darle "punchi" a la cosa). El modelo ha fracasado (o estaría fracasando, así me dejo una cláusula de escape) en generar un "cambio estructural" esperable luego de 5 años de bonanza.

El modelo "integrador de tipo de cambio alto" ha consolidado el esquema de segmentación laboral heredado de los noventa. Llegamos a un desempleo del 7% y la pobreza no baja del 25%. La "latinoamericarizacion" de Argentina se evidencia también en la pobre mejora de los indicadores de distribución del ingreso.

La base de competitividad internacional continua siendo casi exclusivamente el bajo costo del factor trabajo en dólares, más algunos precios relativos claves encorsetados (siendo la energía el caso mas emblemático) cuyos costos ya pueden, sin dificultad, medirse en varios puntos del PBI. No hay indicios claros de un cambio profundo en la matriz productiva nacional que dé margen para ilusionarse y, sobre todo, no se ve ninguna voluntad por parte del gobierno en avanzar el la definición de una estrategia productiva de mediano plazo.

Los diarios abundan en titulares del estilo "Acuerdan un subsidio para la industria del calzado" o "buscan bajar las tasas de interés" y escasean los debates sobre el modelo de país que queremos.

Así, el "modelo" queda a medio camino entre lo que prometía ser y lo que es.

Pero lo mas grave, lo más triste, es lo que el modelo no es.

El modelo no es uno que busque resolver los problemas estructurales de la economía. El gobierno ha mostrado indefiniciones en todas y cada una de las áreas de política económica salvo las macroeconómicas.

Ha habido nulo avance en el diseño de políticas en áreas tan diversas como la política comercial e inserción internacional, servicios públicos y privatizadas, política tributaria, políticas sociales, combate contra la informalidad laboral, política industrial (y agropecuaria, claro), deuda externa, federalismo fiscal, profundización del sistema financiero, and so on, and so on...

El desarrollo no llega solo. Si fuera tan fácil como subir el tipo de cambio (o empobrecer al vecino, como se lo conoce en la jerga) y esperar, el mundo seria un lugar mucho mas feliz.

Así llegamos a este 14 de Abril, 34 días después de aquel triste 11 de Marzo que chorreaba pesimismo , habiendo recorrido un camino que sin duda nos dejó peor de lo que estabamos. La pregunta es ¿Alguien se anima a medir cuanto retrocedimos desde entonces?

Preocupado por mi salud mental, yo no me animo ¿Ustedes que piensan?

Atte.

Elemaco (Con oportunisima correcciones de Genérico)

viernes, abril 11, 2008

Sólo a un click de distancia

Sólo nos faltaba esto... puro sex appeal que le dicen.



Feliz Viernes.

Generico

jueves, abril 10, 2008

Atention: ¿Rebelión de los iguales?

Descubrí gracias a Moe, el fabuloso, increíble, provocador de insomnio blog de Andy Tow. Hay demasiados datos como para que a un ñoño como quien escribe no se le machuquen algunas sinapsis cerebrales. Evito hacer descripciones de las descargas hormonales que me generó su descubrimiento para no incitar a que me bauticen con nuevos apodos. Agroboy, Astroboy, ElemaNco o Economista Cereal son suficientes como para andar encima incentivando otros con connotaciones sexuales.

Sin embargo, quería hacer una aclaración pertinente antes de que salgan quichicientos post analizando las moralejas del siguiente grafico:

Andy Tow concluye que “los cortes de ruta están asociados con el grado de disparidad en la distribución de la tierra.”

Sin embargo, hay que hacer una aclaración importante. La concentración de la tierra a nivel de establecimiento agropecuario (lo cual tiene problemas metodológicos que por el momento ignoraré) se analiza dentro de cada departamento. No dice nada sobre el tamaño medio de la explotación ni de su relación con el tamaño en otros departamentos.

Para clarificar lo que quiero decir imagínese dos departamentos, de 50.000 y 10.000 hectáreas respectivamente. En el primero hay dos establecimientos de 25.000. En el segundo hay una explotación de 5.000 hectáreas y 10 de 500 (con diferentes dueños, obvio). Aquella tendrá un Gini perfecto de cero, la distribución ideal. La segunda región, en cambio, uno bastante superior.

Si todos los piquetes se hicieran en la primera región, se obtendría un resultado equivalente al que concluye Andy (perdón por la confianza) y la conclusion implicita en el título de su post seria bastante forzada.

Por eso, dejo este post tan sólo como una advertencia. A vos te hablo, que pensabas hacerle decir al grafico de Tow cosas que no dijo. Sabelo. ¡¡Te estoy mirando!!

Atte

Elemaco

domingo, abril 06, 2008

Intervenir o no intervenir ¿Esa es la cuestión?

Permítanme disentir con la afirmación de Escriba sobre el último conflicto según el cual "En un primer nivel se juega la posibilidad del Estado democrático de intervenir en la economía". Espero no tome el disenso como una ofensa.

Aunque es muy tentador separar las aguas entre ortodoxos y heterodoxos, entre derecha e izquierda, liberales-proteccionistas o entre los noventas y el siglo XXI, creo el debate de "primer nivel" viene por otro lado.

Personalmente creo que el mercado puede fallar y que dejar que funcione solo puede, en más de una situación, llevar a resultados "infelices". Nótese que dije "puede" lo cual deja implícito que el mercado también puede no fallar. Cuantos más lejos estén de cumplirse los 17 supuestos de Axel, más probable es que sea necesaria la intervención del Estado. La identificación de cada caso no es un problema teórico, sino empírico. Sentarse y "hacer las cuentas" a ver si conviene la intervención o no.

Cualquier política publica, cualquier intervención es, por definición, justa o injusta. No puede no ser alguna de las dos, ni las dos a la vez. Definir "Justicia" es claramente una tarea subjetiva. En el terreno de las políticas tributarias suelen pedirse dos criterios para que algo sea justo: Que trate igual a los iguales y distinto a los distintos (esto último en un sentido progresivo, desde ya). Podemos debatir sobre este punto si quieren, pero no creo que el resultado al que lleguemos sea muy diferente.

La justicia o injusticia de una medida es independiente del resultado de la misma. Una política injusta puede llevar a un "mundo mejor" y una justa a un "mundo peor". Las otras dos combinaciones son las más evidentes.

El gobierno tiene un abanico de políticas para elegir. Las política justas que resultan en "mundos peores" son claramente indeseables. Ahora bien, que una política injusta sea deseable o no no está claro desde un principio. Una política injusta puede ser defendida si sus resultados más que compensan la injusticia cometida. En definitiva, dependerá de como se valore desde lo político el reparto de costos y beneficios entre ganadores y perdedores.

Las retenciones, por definicion, son un impuesto injusto. Es injusto, no hay con que darle. Discrimina entre iguales (ricos de la ciudad vs ricos del campo) e intrasectorialmente es regresiva. Sin embargo, su aplicación es defendible en tanto los resultados globales compensen esta injusticia.

Pero este resultado es dinámico. Una misma política puede ser deseable hoy (el resultado global ser mayor a la injusticia) e indeseable mañana. De la misma manera, una política que era deseable al 20% puede no serlo al 40%.

Desde lo estrictamente económico, entonces, se puede estar en contra de la polémica medida del 11 de Marzo sin recurrir al clivaje "ortodoxo-heterodoxo". Personalmente creo que el Estado debe intervenir en la economía (que no es lo mismo que decir que toda intervención del Estado sea buena), pero entiendo, por un lado, que las retenciones son injustas, como así también que sin ellas el "modelo" no se sostiene. Pero con la última medida, para decirlo en criollo, se zarparon y, sin duda, la “forma” de tomar la decisión (lanzar el decreto y después proponer negociaciones, acusar de golpistas, oligarcas, yuyos, etc) no es neutral para el que recibe la medida discriminatoria en su contra.

¿Qué quiero decir con todo esto? No creo que en el debate de fondo se esté cuestionando la capacidad estatal de intervenir en la economía, sino si la injusticia que se comete no ha superado los beneficios que se derivan de ella.

Saludos

Elemaco

viernes, abril 04, 2008

Los 17 supuestos de Axel

No me invitó a debatir a mi y mi ego está sensiblemente dolido. Ninguneado, realizo aqui un ejercicio de despecho, del cual probablemente me arrepienta luego de 2 o 3 horas de terapia.

Explica Axel en su nota de página 12

"Si en una rama industrial se registrara un incremento de la demanda y un consecuente aumento de precios, los productores obtendrían ganancias extraordinarias. Pero en cualquier negocio estas superganancias serían sólo transitorias. Con el tiempo, podrían sumarse nuevas firmas que con una inversión similar producirían exactamente el mismo artículo en exactamente las mismas condiciones, aumentando así la oferta hasta que tal ganancia extraordinaria se esfumara.

Asi, Axel llega a una "ganancia normal" a partir de la cual se determina la "ganancia extraordinaria". Permítanme hacer un breve punteo teórico (¡y aburridismo! Lo se. ¡Perdonen!) de los supuestos necesarios para que el mecanismo que él propone funcione o, para decirlo en términos más modernos: ¿Que hace falta para que los mercados ajusten solos?

Aclaración: Si cualquiera de los siguientes supuestos es falso, la afirmación es falsa, o sea, la ganancia “normal” no existe.

Axel supone que...

1. ...los inversores reaccionan todos igual frente al riesgo,. O sea, supone que todos los tipos van a esperar la misma ganancia por el mismo riesgo percibido.

2. ...los inversores tienen capacidad de percibir el riego real de una inversión. ¡Conocen el futuro! No saben lo que va a pasar, pero conocen todo lo que puede pasar y cual es su probabilidad. Y, ademas, todos perciben lo mismo.

3. ...el conocimiento es igual en todos los seres humanos. Todos saben todo. Dice "podrían sumarse nuevas firmas que con una inversión similar producirían exactamente el mismo artículo en exactamente las mismas condiciones", lo cual implica que...

4. ...no pueden diferenciarse aprendiendo. Uno tiene una fabrica y hace un pequeño descubrimiento que lo vuelve mas productivo y automáticamente es conocido por todo fabricante que lo aplica instantaneamente, y le impide sacar un provecho de eso. No hay "Learning-by-doing".

5. …no existen las patentes, que permitan apropiarse parte de ese conocimiento común.

6. …no existen las marcas ni la lealtad del consumidor. La gente no mira la etiqueta de los Jeans ni distingue entre Sony o SoRny (aunque ambos salgan de la misma fábrica china).

7. …el consumidor conoce siempre lo que esta comprando. Nunca le venden gato por liebre. No existe información asimétrica.

8. ...el capital físico es perfectamente móvil. Es una masa de plastilina que puede usarse indiferentemente en cualquier actividad productiva. Una cosechadora puede producir mañana tubos de acero sin costura y pasado energía eólica.

9. ...el "capital humano" es perfectamente móvil. Un trabajador rural puede hoy arar la tierra, mañana manejar un reactor nuclear y pasado editar un disco de los Bee-Gees.

10. ...no existen problemas en el acceso al financiamiento. Cuando aparece una oportunidad de inversión, automáticamente hay un banco que, a alguna tasa de interés, esta dispuesto a prestarte plata.

11. ...una fabrica de U$D 100 millones produce exactamente lo mismo que 100 fabricas de U$D 1 millón. No existen "economías de escala"

12. ...en Argentina, todos los bienes son no transables, de manera que su precio se determine por lo que pasa dentro del país, o en su defecto supone que...

13. ...la Argentina es lo suficientemente grande como para determinar los precios en todos los mercados del mundo.

14. ...no existen estructuras de mercado no competitivas. No existen los monopolios, los oligopolios, monopsonios, etc.

15. ...los inversores son neutrales al riesgo. Les da lo mismo poner un plazo fijo que les pague 10% que invertir en una planta de fisión nuclear que pueda mandarlo a la quiebra o volverlo millonario, pero que mas o menos le de un 10%.

16. ...la producción no se realiza en un punto geográfico real, sino en una nebulosa violeta. Es lo mismo poner una fábrica de zapatos en Morón que hacerlo en Tacuarí y no se derivan ganancias diferenciales de ello.

17. …la producción tampoco sucede en un momento del tiempo. Las inversiones se realizan instantáneamente. Ganancia extraordinaria, PLOP y ya tenés una fabrica produciendo el bien, bajando el precio y normalizando el beneficio.

Hasta aquí los primeros 17. Me estoy olvidando por lo menos de 17 más. ¿ Alguien recuerda alguno más? Aviseme en un comment y lo agrego a la lista.

Insisto. Cuando se afirma que existe una ganancia “extraordinaria” se afirma tambien que existe una ganancia “normal”. Afirmar que existe una ganancia “normal” significa afirmar, al menos, todos los supuestos anteriores.

Buen fin de semana

Elemaco


miércoles, abril 02, 2008

Vea Patrón

Existe en el conflicto del agro, un actor poco mencionado. Además del gobierno, del gran productor, del mediano, del chacarero y de cualquier otro que posea algún pedazo de tierra, están los otros, aquellos que también son parte del interior, del campo, es decir, los trabajadores rurales.

Para contextualizar. A precios constantes el sector “Agricultura, Ganadería, Caza y Silvicultura” (Agro, de ahora en adelante) representa algo así del 6% del Valor Agregado Bruto (VAB) del país. Probablemente a precios corrientes, este sector tenga un mayor peso en el VAB y también es de esperar que una nueva base en el sistema de cuentas nacionales implique una mayor participación del Agro… pero en ningún caso llega a ser el sector de mayor peso. En términos de puestos de trabajo, la participación del Agro es menor al 8% con tendencia a caer en los últimos años (lo cuál, obviamente implica que, en los últimos años, el empleo en el Agro creció menos que en la economía en su conjunto). Por último, en 2006, la cantidad de puestos de trabajo del agro supera los 1.200 millones, donde sólo 820 mil son asalariados.

Dos cuestiones. Por un lado está la distribución. Veamos el gráfico a continuación. La participación del trabajo en el VAB no supera en ningún momento el 40%... claro, para un sector donde mucha de la producción corre por cuenta de sus propios dueños, cuentapropistas y arrendatarios, esto no debería ser raro. Sin embargo, vista la historia desde 1993, se observa que luego de la crisis de 2001/2 el peso de los trabajadores agrarios en su PIB se desplomó y nunca se recuperó. Lo cuál dicho de otra forma, no es más que decir, que del de crecimiento de los últimos años, los trabajadores solo captaron una parte marginal. O dicho de otra forma, en los ’90 la cosa era más equitativa ¿será por eso que a diferencia de los empresarios urbanos, cuando los productores del agro hablan de aumentos de costos mencionan cualquier otra cosa antes que los salarios? (al menos aquellos que emplean mano de obra, no?). Por otro lado, están las condiciones de ese empleo. Ese argumento es viejo y conocido. En el Agro, predominan las condiciones precarias de contratación. Bueno, yo no sé uds, pero un sector que tiene más del 60% de sus trabajadores fuera de la seguridad social, esta bastante precarizado (por decir lo menos). Otra vez, el crecimiento de los últimos años muestra cierta formalización del empleo en el sector, pero como dijimos recién, más del 60% de la fuerza laboral está en negro y no hay con que darle.
Salario real. Claro, bien podría ser que a pesar de tener una mala distribución y pésimas condiciones laborales, los salarios que paguen fuesen elevados respecto del resto de la economía (sería una situación extrema, pero también posible). Bueno, tampoco es el caso. Un empleado promedio del agro tiene un ingreso real que no llega a ser el 60% del ingreso medio de toda la economía. Aquí, una vez más, es cierto que en el actual esquema esta situación parece mejorar en comparación con la década pasada, pero también, una vez más, es cierto que el fuerte crecimiento del agro se dio en estos últimos años, y dada la mala distribución del ingreso, los trabajadores rurales la vieron pasar.

Dijimos, también, que la mayor parte de los trabajadores rurales están en negro. Ahora, en este sector, ¿también se da una fuerte disparidad salarial entre las diferentes formas de contratación?. Pues la respuesta es a todas luces, sí, sí y sí. Un empleado formal gana un 95% más que uno informal, y esas situación estructural no cambia en los últimos años! Y si bien es cierto que hoy, un empleado del agro gana más que lo que ganaba en la convertibilidad, no es menos cierto que la rentabilidad del agro se ha multiplicado en igual período (si no lo cree, vuelva al primer gráfico), y que en ese contexto, la recuperación del salario del agro parece bastante retrasada (y ni empiecen con la productividad, por que tampoco es un buen camino).

Conclusiones. Es de esperar que en un sector dinámico, moderno, que invierte en tecnologías de punta y que esta integrado al mundo, los trabajadores presenten los mayores salarios de la economía, junto con excelentes condiciones laborales. Al menos, esos se dice cuando se habla de sectores estratégicos. Zitarrosa solía decir:

Patrón, esa sombra carne al sol que le rotura
con sueldo enano su tierra oscura
Patrón y que usted disfruta, ese es su peón

Saludos,

Genérico

martes, abril 01, 2008

La teoría económica contra los argumentos contra el campo.


Algunas discrepancias conceptuales con Axel Kicilof (uno de los mejores docentes que tuve en la facultad) y su nota para pagina 12, sobre cuales son las enseñanzas que la teoría económica puede darnos sobre el debate Gobierno progre preocupado por el pueblo vs campo golpista oligárquico cuatroporcuatrero.

Primero: Las retenciones no gravan la renta. Repito: no gravan la renta. Ni siquiera gravan las ganancias, sean estas ordinarias o extraordinarias. Gravan la exportación o, lo que es lo mismo, el ingreso.

El porcentaje de renta respecto del ingreso total es absolutamente independiente al determinar el monto a pagar de retenciones. Ejemplito: Olvidemos los costos de transporte. Imagine una hectárea en zona núcleo que saca 30 quintales de soja sin hundir un peso y una en Formosa que consigue los mismos 30 metiéndole papota por costos equivalentes a 10 quintales. Ambos deberán pagar un 45% de retencion sobre 30 quintales (13,5 quintales) aún cuando en la Zona Núcleo la ganancia + la renta fue de 30 quintales y para el de Formosa 30 de ingreso menos 10 de costos = 20 quintales.

Segundo: Como quedo en evidencia en el ejemplo anterior, las retenciones, dentro del sector, son regresivas: Al igual que el IVA, paga proporcionalmente más el que menos gana. Vuelvo al ejemplo:

Zona núcleo: Ganancias + Renta = 30, retenciones = 13,5, retenciones respecto a ganancias + renta = 45%
Formosa: Ganancias + renta = 20, retenciones 13,5, retenciones respecto a ganancias + renta = 67,5%

Evito el grafiquito a dos colores porque creo que la idea está clara. Cuanto menor es mi ganancia, mayor es el porcentaje que cobra el gobierno. Simple, no hay con que darle. Para más detalle pregúntenle a Musgrave, Ana o Lindahl que de impuestos la saben lunga.

Así que repete avec moi: Las retenciones no gravan la renta, ni las ganancias, gravan la exportación y encima son regresivas.

Tercero: La renta de la tierra es independiente del tamaño de la explotación.

¿Como? Sip, triste pero Rial. Junta toda la Provincia de Buenos Aires en una sola explotación monstruosa o hace una revolución agraria con 120.000 microexplotaciones y la renta que generaran es exactamente la misma, porque si los argumentos de los finalmente reivindicados Ricardianos son ciertos, entonces la renta surge de las fuerzas inalienables de la tierra fértil que transforman milagrosamente semilla en soja y no de quien sea su dueño o cuantos sean.

¿No me creen? Entonces miren el siguiente gráfico. Supongamos por un instante que el rinde de una explotación no tiene nada que ver con lo que haga el productor sobre ella, como pareciera entenderse en este post de Tavos con su ilustrativo comentario sobre la sangre, sudor y lágrimas.

Cada punto es uno de los 152 departamentos de Buenos Aires, Salta, Entre Ríos, Córdoba o Santa Fe, que suman en su conjunto el 85% de la producción sojera del país. En el eje de abajo esta el rinde promedio por departamento, en el vertical el tamaño promedio de la explotación, todo según datos del Censo Nacional Agropecuario 2002.

¿Eso tiene pendiente Negativa? ¡Sip! Parecería que cuanto menor es el establecimiento promedio de un departamento, mayor es su rinde.
Me contengo, por respeto a la damas que puedan leer este blog, de hacer referencias sexuales sobre el tamaño y el rendimiento por considerarlo un recurso chabacan.

Así, la defensa del pequeño productor no es compatible con el argumento de las rentas extraordinarias. ¿Si el pequeño productor deriva su supervivencia de la renta que le extrae a la tierra es menos rentista?

Cuarto: Las retenciones no solo son regresivas intrasectorialmente, sino que también viola uno de los dos principios de justicia distributiva, a saber: Tratar igual a los iguales (el otro es tratar distinto a los distintos.

Nadie duda que el gran oligarca terrateniente debe pagar muchos impuestos (y si encima es golpista todavía más), pero la regla debería ser homogénea para evitar ser injusta. Simple: Cuanto mas rico sos, mas pagas. sin aclaraciones, sin peros, sin "y si tu plata la tenes en el campo un poco más" sino se está cometiendo una injusticia.

100 Hectáreas en zona núcleo tienen que pagar muchos mas impuestos que 100 en Formosa no por argumentos etéreos sobre la renta diferencial, las productividades, la puja eclesiástica o las fuerzas inalienables del ocaso, sino porque valen mucha mas plata!!! El tipo de zona núcleo es más rico y por eso tiene que pagar impuestos.

¿Y saben que impuesto grava la riqueza? Si dijo el impuesto a la riqueza o bienes personales o incluso el impuesto a la tierra acertó. Si dijo retenciones Wrooooooooooong, vuelva al primer punto.

Pero claro, las retenciones las cobra el Estado Nacional y los otros son para las Provincias y Municipios.

Conclusiones hasta aquí: (1) Las retenciones son por definición regresivas (2) Discriminan entre iguales. El Rico del campo es malo, el de la ciudad es menos malo (3) Olvida que la renta no depende del tamaño y entra en una contradicción cuando defiende a los productores chicos

Hasta aquí argumentos en contra de algunas Zonceras. Se hizo largo, dejo algunas en el tintero. Además, es demasiado triste ver como ya empezó la campaña sucia y se me fueron las ganas de escribir.

Atte

Elemaco

Aclaración: No estoy en contra de las retenciones. Son claves para la consistencia macroeconómica. Pero eso no significa que todo argumento que se usa en su contra es valido o cierto.

¡Fuchale las Babuchas!


¡1/3 de la página 15 en Ambito Financiero y el post copiado practicamente entero! ¡Perdonenme, no lo puedo evitar. Soy cholulo!

¡Y para colmo, sin ver un sope, por amor al arte! ¿Saben cuanto junte con las 4000 visitas de los últimos 15 diás con los avisos que aparecen en la cabecera del blog, que me generan una pequeña renta extraordinaria cada vez que un usuario hace un click?

¡UN EURO! !UN EURO¡ ¡A razón de cero, cero cero cero veinticinco centavos por visita!

Ya fue, no queda otra. Con el blog no me voy a hacer rico. Sera cuestion de juntar pesito por pesito, y comprar un campo en Pergamino.